Luna Lunera: by the moonlight shadow
Reivindicando el patrimonio cultural a base de emociones, el Festival Luna Lunera lleva ocho años y siete ediciones revolucionando la habitual concepción del festival veraniego. En 2009 sigue con su historia, abarcando desde su prisma de música de autor a artistas de la cantera aragonesa, en conjunción con estrellas nacionales e internacionales.
El marco imponente de la Lonja Medieval de Sos del Rey Católico ofrecerá grada para tan sólo 500 adeptos por recital, un elitismo ya de por sí altamente diferenciador: poco público y sentado. La sensación será la de un pueblo reunido en torno a un mercado medieval, rematado por un trovador que elevará cada noche los espíritus de todos los asistentes a esa plaza porticada. El auditorio de la Lonja verá desfilar bajo sus arcos a artistas dispares entre sí, dando lugar a 15 días donde la magia se encontrará en el eclecticismo.
En esos claroscuros de luna, lo mismo será posible encontrarse a Joan Manuel Serrat desplegando sus cacofonías, que a los irresistibles Marah haciendo gala de toda su inervación rockera. También resonarán en esos templos de la historia las ingrávidas guitarras de Russian Red , las canciones de "Ready for the Flood", catártico nuevo disco de The jayhawks, que suponge la esperada reunión de Mark Olson y Gary Louris; la oda al deporte del multi-protagonizado The Baseball Project; las insistentemente coreadas canciones del hechizante disco de Vetusta Morla, "Un día en el mundo", o el siempre familiar rock de Tequila y Enrique Bunbury. Después de los conciertos, seguro que encontraremos algún habitante de la villa que nos brinde un buen vino mientras nos desgrana qué es qué entre tanto patrimonio que se nos viene a los ojos. Luna Lunera se alza como una muralla infranqueable frente al resto de propuestas, un hito turístico y cultural que enlaza la intensidad del espacio con la intensidad del momento, a través de los siglos que van de la baja edad media a la alta vanguardia.
El marco imponente de la Lonja Medieval de Sos del Rey Católico ofrecerá grada para tan sólo 500 adeptos por recital, un elitismo ya de por sí altamente diferenciador: poco público y sentado. La sensación será la de un pueblo reunido en torno a un mercado medieval, rematado por un trovador que elevará cada noche los espíritus de todos los asistentes a esa plaza porticada. El auditorio de la Lonja verá desfilar bajo sus arcos a artistas dispares entre sí, dando lugar a 15 días donde la magia se encontrará en el eclecticismo.
En esos claroscuros de luna, lo mismo será posible encontrarse a Joan Manuel Serrat desplegando sus cacofonías, que a los irresistibles Marah haciendo gala de toda su inervación rockera. También resonarán en esos templos de la historia las ingrávidas guitarras de Russian Red , las canciones de "Ready for the Flood", catártico nuevo disco de The jayhawks, que suponge la esperada reunión de Mark Olson y Gary Louris; la oda al deporte del multi-protagonizado The Baseball Project; las insistentemente coreadas canciones del hechizante disco de Vetusta Morla, "Un día en el mundo", o el siempre familiar rock de Tequila y Enrique Bunbury. Después de los conciertos, seguro que encontraremos algún habitante de la villa que nos brinde un buen vino mientras nos desgrana qué es qué entre tanto patrimonio que se nos viene a los ojos. Luna Lunera se alza como una muralla infranqueable frente al resto de propuestas, un hito turístico y cultural que enlaza la intensidad del espacio con la intensidad del momento, a través de los siglos que van de la baja edad media a la alta vanguardia.
Fuente: go-mag (sonar´s official magazine).
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